2006-08-04

Agatha





Érase una vez un hámster hembra (?) llamado Agatha.
Éste es un réquiem a sus bondad, a sus ganas de posar ante la cámara (modelo desde su nacimiento) y su infinita paciencia a quedarse sin agua y sin comida gracias a mi...
Pero bue, la HDP se escapó una buena noche.
Abandonó al pobre Cedric y a su pobre dueño...
Al día siguiente compré un gato que se llamaba Pepito, que se encargó de rastrear las pequeñas huellas de la prófuga...
No sólo encontró las huellas, encontró todo su diminuto cuerpo y se lo engulló.
Dos días después compré un perro, "bulldog" le dicen a su raza, le puse de nombre "Gato" y se encargó de Pepito, y ni tuve que pedírselo.
Esta fue la historia de Agatha, Pepito y Gato. (*)

(?) No sabíamos muy bien si Agatha era hembra o macho.
(*) Ni Pepito ni Gato existieron.
Esta es una historia verdadera de la verdadera vida real y no virtual.

Estas son las fotografías de Agatha...

Arriba: Agatha diciendo: Wazz Uppppp? Dentro de su lata favorita.

Medio: Agatha posando para la revista "PlayHamsterBoy".

Abajo: Agatha Ejercitándose para lucir bien en la portada de la revista.

1 comentario:

:Guille: dijo...

Yo también tuve un hámster en mi infancia, permíteme contarte su historia.

Se llamaba Skipy… si, era hembra; me preguntas como lo se? , pues la muy santa me vino premiada (la vida de un hámster en la veterinaria es muy activa), para prevenir cualquier desgracia, hablamos con un veterinario sobre tratos de babys hámsteres (tuvo muchos bebes, creo 8, pero de eso solo sobrevivieron 5).
De eso 5, se quedo uno a mi cuidado o mejor dicho al cuidado de mi hermana, se llamo kysixia (hasta ahora no se de donde sacaron ese nombre).
Un tiempo después vino Slapy, un hámster macho para que haga compañía a Skipy y adopte como hija a Kysixia.
El desgraciado dejo embarazadas a las dos, y trato de escapar, pero su intento de escape fallo, ya que su jaula se encontraba sobre una mesa, y digamos que fue en búsqueda de la libertad infinita, o simplemente no quiso mantener a sus hijos (imagínate, si un hámster tiene aproximadamente 8 hijos, multiplicado por dos O_O, quien no se querría suicidar)
Lastimosamente ninguno de sus hijos sobrevivió, (fue mas o menos un aborto, ya que ambas madres comieron los hijos de la otra (repugnante), al parecer deberíamos haberlas separado, pero no lo hicimos).
Unos años mas tarde, a Skipy le llego su hora; su muerte fue muy difícil de superar (ella tuvo una muerte natural, ya estaba viejita la pobre). Después ya no podía mantener a Kysixia (porque vino un perro que le quería comer) y para su bien, le regale a un amigo de confianza; pero iba a ser mejor ser comida por un perro, que sufrir la terrible muerte que tubo. Mi “amigo”, se olvido que la dejo en el patio, y para colmo se olvido de darle agua; prácticamente se rostizo en una tarde de verano.
No se si esto es una triste historia, pero me agrada recordar los buenos momentos que pasamos, extraño esos momentos.